La Real Academia de la Lengua (RAE) define de la siguiente manera el término
involución(Del lat. involutĭo, -ōnis, acción de
envolver).
1. f. Acción y efecto de
involucionar.2. f. Detención y retroceso de una evolución biológica, política, cultural, económica, etc.
La segunda acepción es
la que está definiendo la realidad política y social de nuestro
país. Un significativo y cruel retroceso en la evolución política,
cultural, económica y social en tan solo 120 días de gobierno del
Partido Popular.
Al amparo de la buena
sombra del árbol germánico que da cobijo y aliento a las últimas
medidas del Consejo de ministros que cada viernes, irremediablemente,
se empeña en destruir lo que tantos años costó construir a
nuestros predecesores.
España se está tiñendo
de blanco y negro, de matices de grises, de lágrimas negras, de
hollín, con un suave e intenso olor a incienso y con un tenue
murmullo de gregoriano.
El ataque, brutal, que el
gobierno del PP está realizando a las bases del consenso en el se
creó nuestra democracia va a tener consecuencias a corto, medio y
largo plazo. Detener nuestra evolución democrática es un retroceso
que nos pretende llevar a realidades ya superadas o al menos eso
pensábamos.
Pilares de la sociedad
española como la Educación secundaria y universitaria; la Sanidad
pública, gratuita y de calidad; Medios de comunicación públicos e
independientes; transportes públicos; y la amenaza nueva de cobrar tasas por circular en
autovías;... es un retroceso que nos sitúa lejos de Europa y cercano a un país al estilo de Guinea
ecuatorial (con perdón por los guineanos) con relación al acceso a los servicios públicos.
Este modelo, que Alemania nos indica y cuenta con el asentimiento del PP, lleva aparejado en EEUU la cifra de 57 millones de pobres sin ningún tipo de recursos y alejados del derecho a la sanidad, educación o servicios sociales. 57 millones de almas que viven más que en el sueño americano en la pesadilla ultraliberal.
Y Europa no puede copiar
ese modelo. Europa es o ha sido impulsora de modelos sociales
sostenibles. Europa tiene que mirarse a sí misma, a su Historia y no mirar en
modelos ultraliberales fracasados desde el punto de vista social. Y
si eso quiere Alemania que lo copie para sí pero que no imponga a
ritmo de bota prusiana económica su voluntad a no ser que ese sea
el modelo de nuestro actual gobierno. Y algo me parece indicar que
así es.
La Historia es tozuda y
otra vez Francia será la patria de la “liberté, égalité
et fraternité”. Las elecciones presidenciales francesas decidirán el futuro de Europa
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